La vivienda: a subasta

Si se ha visto inmerso en un proceso de desahucio, es primordial que se ponga en manos de un buen abogado para que se encargue del asunto. Nuestro despacho en Alicante es experto en materia hipotecaria, así que no dude en contactaros.

El desahucio consta de varias fases. Primero se recibe la demanda, el siguiente paso es que su abogado conteste, pero si no se han pagado las deudas, se avanza al siguiente paso, que es la subasta de la vivienda para que el acreedor pueda recuperar todo o parte del dinero que se le debe. La subasta se avisa con veinte días de antelación. Si en ese plazo se reúne el dinero para pagar las deudas, la subasta se anula, así como todo el resto del procedimiento, y el deudor podrá conservar la vivienda. No obstante, deberá seguir atendiendo al pago del préstamo hipotecario que todavía resta.

En la subasta, lo habitual es que aparezca un comprador de la vivienda. El piso se ofrece por un 70 del valor de tasación, pero como esto no cubre toda la deuda, el deudor seguirá debiendo al banco lo que falte, quien seguirá reclamando la diferencia. Si nadie compra a ese precio, la vivienda se adjudica al 60 de su valor en el caso de que fuera residencia habitual y al 50 si fuera segunda vivienda. Si en el plazo de cinco años el deudor consigue cubrir el 65 de su deuda, o en diez, el 80, el banco deberá dejar de reclamar.

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